El piloto mexicano de Red Bull había remontado desde la séptima posición gracias a una estrategia acertada.
PAÍSES BAJOS – Sergio Pérez vivió una carrera de contrastes en el circuito de Zandvoort, donde pasó de ser líder provisional a terminar cuarto por culpa de la lluvia y una penalización.
El piloto mexicano de Red Bull remontó desde la séptima posición gracias a una estrategia acertada de cambio de neumáticos, pero no pudo mantener el ritmo en las últimas vueltas.
No se pusieron de acuerdo
La lluvia fue la protagonista de la décima tercera fecha de la temporada de Fórmula 1, que se disputó este domingo en los Países Bajos. Pérez aprovechó las primeras gotas para adelantar a sus rivales y llegar a liderar la carrera, mientras que su compañero Max Verstappen perdía tiempo en los pits.
Sin embargo, el holandés recuperó el primer puesto y se escapó hacia la victoria, dejando a Pérez en una lucha con Fernando Alonso por el segundo lugar. El español de Alpine presionó al mexicano, que resistió hasta que un aguacero le hizo perder el control y salirse de la pista.
Quedó fuera del podio
Pérez logró volver al asfalto, pero cedió el segundo puesto a Alonso y el tercero a Pierre Gasly. La situación se complicó aún más cuando la bandera roja detuvo la carrera a falta de pocas vueltas para el final. El mexicano entró a cambiar gomas y perdió más posiciones, pero se benefició del relanzamiento con el orden anterior.
No obstante, en el reinicio Pérez cometió otro error al superar el límite de velocidad y recibió una sanción de cinco segundos, que le hizo bajar del podio y acabar cuarto. Gasly se quedó con el tercer lugar, mientras que Alonso fue segundo. Verstappen celebró su triunfo ante su público y amplió su ventaja en el campeonato.