El empate de último minuto del Pachuca, provocó la calentura del Necaxa, por lo que se armó la pelea sobre la cancha del estadio Victora. Fue al minuto 94, a segundos del silbatazo final de Fernando Guerrero, cuando Unai Bilbao le dejó un recuerdito a Miguel Herrera.
MÉXICO - El empate de último minuto del Pachuca, provocó la calentura del Necaxa, por lo que se armó la pelea sobre la cancha del estadio Victora. Fue al minuto 94, a segundos del silbatazo final de Fernando Guerrero, cuando Unai Bilbao (Rayos) le dejó un recuerdito a Miguel Herrera, quien se prendió sobre el zaguero rojiblanco.
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El tuzo tuvo que ser sostenido por varios jugadores, compañeros y rivales, para tranquilizarlo, pero estuvo desatado. Mientras que Idekel Domínguez, del Necaxa, derribó a uno del Pachuca.
El cuerpo arbitral fue incapaz de controlar y todos, hasta los de las bancas, saltaron a la cancha; algunos para empujar y seguir con la broca, otros para intentar relajar la situación. A Guerreo no le quedó de otra que dar por terminado el compromiso, un empate que poco sirve a ambos, fuera de la zona de repesca y, para los Tuzos, ya son nueve jornadas sin ganar.
Los goles del partido se concedieron por parte del Necaxa por Alejandro Zendejas, quien fue el que abrió el marcador de la disputa a los 9 minutos recorridos, y Maximiliano Salas, quien marcó a los 49 minutos del tiempo complementario de la primera mitad.
Por los Tuzos los acumuladores de dianas fueron Roberto Nuser a los 20 minutos y Mauro Quiroga, quien salvó a su escuadra de la derrota al marcar el 2-2 faltando cinco minutos para concluir el encuentro que al final tuvo ese amargo desenlace.