Según el jugador del Inter Miami, había familiares de futbolistas entre el público afectado.
BRASIL – La policía local reprimió con golpes y macanazos a la afición argentina antes del partido de fútbol entre Brasil y Argentina. Los jugadores de la Albiceleste se acercaron a la grada para pedir calma y luego se retiraron a los vestidores.
Después de varios minutos, regresaron al campo y vencieron por la mínima a Brasil. Al finalizar el partido, Lionel Messi reveló lo que pasó y expresó su rechazo a la violencia de las autoridades brasileñas.
Messi no se cayó nada
Según el jugador del Inter Miami, había familiares de futbolistas entre el público afectado por la represión.
“Obviamente que mal, porque veíamos cómo estaba la gente, la policía, como ya pasó en la final de la Libertadores, reprimiendo a la gente con los palos. Había jugadores que tenían familia ahí”, dijo Messi.
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El astro argentino agregó que el equipo decidió irse a los vestidores para que todo se calmara y para comunicarse con sus familiares y saber cómo estaban.
“Hicimos eso porque era la manera de que todo se tranquilizara, porque estábamos ahí también y desde abajo no podíamos hacer mucho, solo veíamos cómo le pegaban a la gente, cómo los tiraban para atrás y podía haber pasado una desgracia”, explicó.